Villa Devoto fue la zona que despertó mayor interés entre las familias de la primera oleada, pues recientemente se habían subdividido las quintas cuyas tierras eran altas y de gran perspectiva a futuro. Estos terrenos eran adquiridos a costos razonables y en cómodas cuotas, lo que constituyó el principal motivo de la dispersión desde sus primitivos asentamientos. La inserción en la sociedad argentina puso en contacto a la colectividad directo con la cultura hispanoamericana. Los frutos fueron inmediatos: en 1927 se publicó en Argentina el primer método esloveno para el aprendizaje del castellano; en 1957 había treinta publicaciones periódicas en lengua eslovena y en 1970 llegaría la traducción del Martin Fierro.
