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Conocé, una por una, las colectividades de la ciudad.

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Colectividad Colectividad francesa

Colectividad francesa

Historia de la colectividad

Gardel, los premios Nobel de Leloir y Houssay y la introducción de los boulevardes dentro del diseño urbanístico de nuestra ciudad son sólo algunos de los hitos que figuran dentro de la larga lista que relaciona nuestro país con esta colectividad. Conocé más sobre ella que, entre otras cosas, nos inspiró a crear el CONICET.
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Gardel es argentino. Fue el mismo cantante el que decidió nacionalizarse en 1923. Y si bien todavía hay controversia respecto del lugar y su fecha de nacimiento (¿nació en Toulouse, Francia, o en Tacuarembó, Uruguay?), en ambas teorías está presente el origen francés de su madre, Berthe Gardes, rebautizada como Berta una vez que Gardel empezó a edificar su mito. Quizás la figura de Gardel sería suficiente para dimensionar el peso histórico de la comunidad francesa en argentina. Pero el aporte es mucho mayor: dos de los cinco premios Nobel argentinos tienen sangre francesa. Luis Federico Leloir, Nobel de Química en 1970, había nacido en París en 1906; y Bernardo Houssay, Nobel de Medicina en 1947, fue hijo de inmigrantes franceses.



Los franceses fueron una comunidad comparable a la italiana y a la española. De hecho, entre 1831 y 1854, ocupaban el tercer lugar en cantidad de inmigrantes. Pero a diferencia de las otras dos comunidades, muchos los franceses retornaron a su país de origen a partir de la crisis argentina de 1890. Se estima que a principios de siglo XX vivían en el país aproximadamente 80.000 franceses. Luego, durante la Primera Guerra Mundial, la cantidad de inmigrantes disminuyó notablemente, e incluso se dio el proceso inverso: muchos de los residentes en la Argentina decidieron volver a luchar por su Patria. A partir de este suceso, hubo más regresos que arribos, lo cual derivó en un decrecimiento de la colectividad a través del siglo XX. Los primeros inmigrantes franceses provenían mayoritariamente del sur del país, de regiones como Haute, Garonne, Corrèze, Gironde, Dordogne, Landes, Gers, Lot et Garonne, Tarn et Garonne, Aveyron, Hautes Pyrénées y Purénées Atlantiques. Entre los vascos y bearneses llegaron algunos militares y líderes que se destacaron en la Revolución de Mayo, tales como Federico de Brandsen, Jorge Beauchef, Ambrosio Crámer e Hipólito Bouchard.



Numerosos inmigrantes franceses se instalaron en las colonias agrícolas de Santa Fe, Corrientes y Entre Ríos, otros en lo hicieron en la colonia bonaerense de Pigüé. No obstante, la mayoría se radicó en la ciudad de Buenos Aires, donde los que traían oficios calificados o contaban con cierto poder adquisitivo eligieron los barrios de San Nicolás y Belgrano, mientras que los trabajadores dedicados a la manufactura, la costurería, el comercio y otros oficios, se establecieron en los alrededores de la actual Plaza General San Martín. Su establecimiento en determinados barrios se vio determinado por la existencia de cafés, hoteles y restaurantes que los empleaban como mozos, cocineros, mucamas, institutrices, modistas, costureras y vendedoras.



Berthe Gardes, la madre de Gardel, fue una planchadora francesa que vivía en el centro de la ciudad, en la zona de los teatros de la calle Corrientes, donde su hijo Carlos interactuaba con el mundillo artístico al que le llevaba la ropa recién planchada. No hay manera de separar la leyenda de Gardel de esos primeros días sobre la calle Corrientes.

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