Para la masa
• 500 g de harina
• 50 g de harina de maíz
• 10 g de sal
• 30 g de levadura
• 15 g de azúcar
• 275 cc de agua
Para la mistela
• 200 cc de agua
• 50 g de harina
• Sal
1. Para la mistela, hervir 200 cc de agua e incorporar los 50 g de harina disueltos con el resto del agua fría y una pizca de sal. Cocinar por 1 minuto hasta formar una crema. Dejar enfriar y reservar.
2. Formar una corona sobre la mesa con los 500 g de harina. Colocar la sal por la parte externa de la corona y en el centro agregar el azúcar junto con la levadura disuelta en agua. Amasar hasta lograr una masa uniforme y trabajarla bien. Formar un bastón alargado y extenderlo con el palo de amasar de forma pareja.
3. Untar toda la superficie con una capa fina de la mistela. Luego, doblar en dos y cubrir la superficie con harina de maíz. Dejar reposar durante 30 minutos aproximadamente.
4. Recortar el bastón de masa para que quede de unos 15 cm de ancho. Marcarlo en el centro y cortar las piezas en forma transversal a 3 o 4 cm de ancho.
5. Estibar y dejar fermentar al doble de su tamaño. Cocinar en horno moderado con vapor por 15 minutos.